lunes, 4 de octubre de 2010

BURIED (ENTERRADO)


Satisfactorio thriller minimalista.

Me parece extraño el caso de una película española como Buried (Enterrado). La poca publicidad que ha tenido en España me sorprende, ya que, otras cintas de muchísima menos calidad, son promocionadas hasta la saciedad. Buried (Enterrado), debería ser meritoria de esa publicidad, porque consigue ser una experiencia altamente satisfactoria.

Rodrigo Cortés, director de Concursante (película que no me dijo absolutamente nada), crea un digno ejercicio de cine. Narra la historia de una forma única, con un atrevimiento merecedor de todo tipo de elogios, transmitiendo al espectador, toda la angustia y desesperación del protagonista. Y es que los 93 minutos de duración de Buried (Enterrado), suceden totalmente en el ataúd.


En la duración, es dónde se encuentra uno de los traspiés de la historia. En algunos instantes, el ritmo decae, haciendo que el aburrimiento se apodere de la pantalla por momentos. Es algo que era de prever, dado que estamos hablando, de que todo sucede en un solo espacio y tiempo. Pero repito, el director, tiene las ideas suficientemente claras, como para mantener la película a flote, y que ésta, nunca caiga en la mediocridad. 

Mucho se ha hablado que el argumento del film, sería ideal para uno de los thrillers de Alfred Hitchcock, y no les falta razón. Incluso los excelentes títulos de crédito, beben de la influencia del director de Psicosis.  Cortés y su equipo, crean una atmósfera completamente claustrofóbica, como si del mejor Hitchcock se tratase; desde la comentada dirección del director gallego, pasando por la exquisita fotografía, y una buena música, compuesta con una partitura que va in crescendo, especialmente en su tramo final.


Comentar la interpretación de Ryan Reynolds, creando un Paul Conroy plenamente aterrado, desesperado por salir de allí, con la necesidad de volver a casa junto a su mujer e hijo. Mencionar el clímax final, dónde el actor hace fácil y adecuado, lo que podría haber acabado en la parodia absoluta. Sin comentar una escena más de lo necesario, destacar el giro argumental y el fabuloso final, que hace saltar a más de uno de la butaca.

Al acabar, el espectador debe esperar a que enciendan las luces, recoger sus pertenencias rápidamente, huir de la sala, poder respirar aire fresco; y reponerse de la hora y media que ha estado atrapado, en el experimento minimalista de su director. 

NOTA: 7

4 comentarios:

  1. con ganas de verla! junto con el otro analisis de machete, se me acumulan las peliculas señores...

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  2. Primero que nada, les dejo mis felicitaciones por el blog.

    En cuanto a la película, justamente hoy leía una crítica en un periódico argentino en la que también remarcaban esas semejanzas con Hitchcock. Así que ya quedé entusiasmado con esta peli. Habrá que verla pues.

    http://vagabundeoresplandeciente.wordpress.com/

    Un saludo.

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  3. Efectivamente hay ganas de verla por su apuesta tan arriesgada y original . Parece que a ti te ha gustado . no estoy de acuerdo en cuanto a la publicidad , de alguna manera tods hemos tenido noticia de ella , incluso en las noticias han mencionado al director salmantino ( aunque parece que no es de alli) . Eso si , no es publicidad tipo " ya estoy en el hormiguero" o salgo a todas horas como cuando estrenan una de Almodovar o Amenabar. Un saludo

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  4. completamente de acuerdo con tu critica, Rodrigo Cortes logra mantener el ritmo pese a contar con un único espacio y tiempo algo que me sorprendió gratamente.

    Felicidades por el blog un saludo.

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