miércoles, 17 de noviembre de 2010

LOS OTROS DOS


Absurda y facilona a chorros. 

Hasta ahora había visto dos películas del tándem Adam McKay y Will Ferrell. Una, era la estúpida Pasado de vueltas, y la otra, la mejorable, pero no menos absurda, Hermanos por pelotas. Con Los otros dos, el director y el actor de El reportero, siguen con su humor absurdo y sin apenas gracia, plagado de chistes fáciles. Me reí en contadas ocasiones, un fallo grave, teniendo en cuenta el tipo de película que es. Y para rematar, tenemos a un Mark Wahlberg, repitiendo papel (policía) por enésima vez , bajo la pretensión de querer ser gracioso y con la nula química que hace con Will Ferrell.


El tremendo problema de Los otros dos es que nunca es la comedia que debería haber sido. Un poco de regularidad en el metraje, chistes más vistosos y no tan facilones, porque el mayor error es la poca gracia que tiene. De la pareja protagonista, el único que parece saber donde está es Ferrell, ya que la aportación de Wahlberg es inexistente. 

Seguro que algunos disfrutaran de su desenfrenado humor absurdo, para quien esto escribe, es un tipo de humor facilón que no aporta absolutamente nada nuevo, y para rematar, 107 minutos de duración que pasan con más pena que gloria y a trompicones. De risa me parece la comparación de ésta, con films como la saga Arma letal o Arma fatal.


Entre chistes sexuales (el mejor chiste de toda la película viene de un grupo de vagabundos), puñetazos sin sentido y situaciones inverosímiles, McKay pretende vender una crítica social sobre que el sistema del poder financiero está por encima de cualquier partido político del mundo. Y lo deja ahí, de puntillas, aportando cero, con aires de trascendencia en un conjunto plano y chorra.

Algún que otro momento salvable como: el mencionado gag de los indigentes, la última escena de los cachondos Samuel L. Jackson y The Rock y la excelente secuencia técnica de la taja monumental que pillan los personajes de Ferrell y Wahlberg. 


Los otros dos es una comedia absurda en la ejecución y la forma, con tufillo social de por medio con escasos chistes que funcionen. Todo ello proyectado de manera simple y desvergonzada que a muchos no les hará ni pizca de gracia (yo mismamente), en cambio, otros se partirán el pecho. Mejor para ellos.

NOTA: 4

3 comentarios:

  1. No la he visto pero cada vez que veo el careto de Will Ferrell en una película procuro huir de ella.

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  2. Todas éstas películas de éste tipo de cómicos me producen arcadas. Mejor no verla.

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  3. Pues la verdad dudaba si verla o no, pero creo que ya voy a desistir de ello...

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