domingo, 2 de enero de 2011

AHORA LOS PADRES SON ELLOS


En el pozo más profundo.

Los padres de ella y Los padres de él se convirtieron en dos simpáticas comedias y en un éxito mundial enorme. La tercera entrega, Ahora los padres son ellos, carece de todos los gags que sostenían aguantaban el tirón de aquellas dos. Paul Weitz (Un niño grande), sustituyendo a Paul Roach en la dirección, dirige sin chispa una cinta que no da más de sí, predominada por un guión ridículo y fallido.

No hay humor, no hay gracia. Los gags aparentemente humorísticos ya hacían acto de aparición en el tráiler del film. El resto nada. Guión plano, banal, sin alma. Es lo mismo que siempre pero peor, mucho peor.


En el reparto se añaden figuras como un desaprovechado Harvey Keitel, Laura Dern, o la irritable Jessica Alba. Todos y cada uno de los repetidores aguantan el tirón como pueden. De Niro sigue en su empeño de autodestrucción interpretativa a la hora de elegir proyectos, y Stiller apurando los últimos compases de un humorista que empieza a perder gas entre el público. 

Me pregunto que hubiera sido de la película si Jay Roach hubiera repetido como director. Quizás hubiera sido mejor, igual o peor. Lo que sí es cierto, es que Wietz no aporta nada y lo empeora todo. Se echa de menos el gag visual de las anteriores, en cambio, apuesta por un humor tremendamente pedante y aburrido.


En fin, poco y nada más que añadir. Un film absolutamente desastroso, en el cual, las risas brillan por su ausencia. ¿Qué si algo consiguió arrancarme una carcajada? Sí. El homenaje a Tiburón en la piscina de bolas, que por cierto, ya hacía acto de presencia en el tráiler.

NOTA: 3

1 comentario:

  1. De Niro ha caido muy bajo haciendo estas interpretaciones. Está claro que ya no saben como avanzar en esta "saga" y han tenido que ganarse la asistencia de la gente poniendo a este y a Jessica Alba como reclamo. ¿Lo peor? Al menos estas dos semanas ha funcionado.

    Monica

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